Dolor de espalda y ejercicio físico: todo lo que debes saber

El dolor de espalda es una de las dolencias más comunes en la población mundial, afectando a millones de personas y siendo una causa frecuente de discapacidad. A menudo, se asume que el reposo es la mejor medicina para el dolor de espalda. Sin embargo, estudios recientes demuestran que el ejercicio físico juega un papel crucial en la prevención y manejo de esta condición.

En este artículo te explicamos cómo el ejercicio puede ayudarte a combatir el dolor de espalda y qué aspectos debes considerar para hacerlo de manera segura.

La relación entre el ejercicio y el dolor de espalda

La idea de que el movimiento y el ejercicio físico pueden aliviar el dolor de espalda puede parecer contradictoria, especialmente cuando el movimiento parece ser la causa del dolor. Sin embargo, el ejercicio adecuado fortalece los músculos alrededor de la espina dorsal, mejora la postura y aumenta la flexibilidad, lo que puede prevenir futuras lesiones y aliviar el dolor existente.

Siempre realizando ejercicios y entrenamientos personalizados con la supervisión de un profesional, como en nuestro centro de entrenamiento en Santiago de Compostela.

¿Cómo te ayuda el ejercicio?

• Fortalecimiento muscular: Los músculos fuertes, especialmente en el abdomen y en la espalda, sostienen mejor la columna vertebral, reduciendo la presión sobre los discos vertebrales y minimizando el dolor.
• Mejora de la flexibilidad: El aumento de la flexibilidad facilita la distribución del peso a través del cuerpo, mejorando la postura y reduciendo la tensión en la espalda.
• Estimulación de la circulación: El ejercicio incrementa el flujo sanguíneo, llevando nutrientes a los tejidos de la espalda y acelerando la curación.

¿Cómo proteger la espalda y evitar dolores?

Mantener la salud de tu espalda es crucial para llevar una vida activa y libre de molestias. Aquí te ofrecemos algunos consejos prácticos para proteger tu espalda y evitar el dolor:

1. Mantén una postura correcta

Al estar de pie, distribuye tu peso de manera uniforme en ambos pies y mantén tus rodillas ligeramente flexionadas.

Al sentarte, elige una silla con soporte lumbar, mantén los pies planos en el suelo y evita encorvarte o inclinarte hacia adelante.

2. Levanta objetos correctamente

Siempre flexiona las rodillas y usa la fuerza de tus piernas en lugar de tu espalda cuando levantes algo del suelo.

Evita torcer tu cuerpo mientras levantas o cargas objetos pesados. Gira con los pies, no con el torso.

3. Fortalece tu núcleo

Incorpora ejercicios que fortalezcan los músculos de tu abdomen y espalda. Un núcleo fuerte ofrece mejor soporte a tu columna vertebral.

4. Estira regularmente

Realiza estiramientos suaves y yoga para mejorar la flexibilidad de tu espalda y reducir la tensión muscular.

5. Mantén un peso saludable

El exceso de peso, especialmente alrededor del abdomen, puede aumentar la presión sobre tu espalda. Trabaja en mantener un peso corporal saludable mediante una dieta equilibrada y ejercicio regular.

6. Usa calzado adecuado

Elige zapatos con soporte adecuado que no alteren la alineación de tu columna vertebral. Evita el uso prolongado de tacones altos.

7. Cuida tu posición al dormir

Utiliza un colchón y una almohada que brinden soporte adecuado. Dormir de lado con las rodillas ligeramente flexionadas puede ayudar a aliviar la presión sobre la espalda.

8. Limita el tiempo sentado

Si tu trabajo requiere que estés sentado por periodos prolongados, toma descansos frecuentes para levantarte, caminar y estirarte.

9. Evita movimientos bruscos

Movimientos súbitos y giros pueden poner estrés adicional en tu espalda. Realiza tus movimientos de manera consciente y controlada.

Antes de comenzar cualquier rutina de ejercicio, especialmente si sufres de dolor de espalda crónico, es esencial consultar con un profesional de la salud. Un  entrenador personal especializado puede diseñar un programa de ejercicios adaptado a tus necesidades específicas y condiciones, y trabajar con un programa de rehabilitación con entrenamiento personalizado.

En nuestro centro de entrenamiento personal 2STEPS podemos ayudarte, llámanos e infórmate sin compromiso.